miércoles, 9 de junio de 2010

Final Copa Xunta.

Pitos, bombos, canciones, callos, tortilla, vino... bueno, y rugby. También hubo rugby. Pero es que la fiesta que supuso la final de la Copa Xunta hay que verla necesariamente en conjunto.

El estadio Miguel Anxo Cortizo de Lalín acogió las finales de todas las categorias el pasado sábado 22 de mayo.

Nuestros cadetes, como ya sabéis, tuvieron la fortuna y la destreza suficientes como para llegar a la final. Pero también han tenido la mala suerte de tener enfrente en este partido decisivo (como ya sucedió en la última jornada de Liga) al imparable CRAT de Coruña, que no defraudó y ofreció un juego impecable, haciéndose con la victoria por unos aplastantes 55 a 5, lo que nos deja segundos en la clasificación definitiva. En la foto superior vemos el momento en que don Alfonso Mandado, presidente de la Federación Española de Rugby, hace entrega de la copa a nuestro capitán.

Pero el resultado (positivo o negativo) es solo una parte de la fantástica fiesta en la que nuestra afición volvió a dejar patente el apoyo incondicional al Pontevedra R.C. y disfrutó, junto al resto de seguidores y jugadores, de un tercer tiempo memorable.

Para ser nuestro primer año como equipo no podemos quejarnos, pues al segundo puesto de los cadetes en la Copa Xunta tenemos que añadir el tercero conseguido por nuestra categoría infantil y los dos segundos en la Liga. Enhorabuena (sub)campeones.

No tenemos fotos del evento, pero os dejamos el enlace al facebook de Diego Dolan, de donde hemos extraído estas dos imágenes últimas y en el que hay otras igual de espectaculares. También os recomendamos acceder al blog de Carlos Morande en La Voz de Galicia, para leer una reseña de todos los encuentros del día.

Y, como broche final, el vídeo que tenéis más abajo es el extracto de un reportaje emitido por RTVE de Galicia. En él hacen mención a la jornada y aparece nuestro equipo. Esperemos que no les importe que hayamos "fusilado" sus imágenes y comprendan que lo hacemos solo con carácter testimonial y sin ningún tipo de interés oculto.